30 años
Está en Ciudad de México
Productor musical, compositor de música para cine, diseñador sonoro
@_edgarmondragon
Spotify
edgarmondragon.bandcamp.com/
Julio
¿Qué interrumpiste y qué has comenzado a causa de esta cuarentena?






¿Cómo ha cambiado la percepción que tienes de tu cuerpo?




¿Cuál es tu relación con la vejez?







¿Ha cambiado el rol familiar que interpretas?


¿Cómo experimentas tu intimidad durante esta pandemia?






¿Qué iniciativas tienes por tu comunidad creativa?





¿Qué relaciones sociales son relevantes para tu trabajo creativo?



¿Por qué modelos de economía creativa apuestas?
Estaba finalizando la producción de mi primer disco de larga duración cuando la cuarentena inició.
A raíz de esto, el concepto y la forma que tenía el disco mutaron. No Hay Recuerdo Que No Se
Apague tuvo que adaptarse en términos de sonido y narrativa a la “nueva normalidad”.

Durante la cuarentena también inicié un proyecto importante: la composición de un soundtrack
para una película, la ópera prima del director austríaco Luca Senoner.

Durante la cuarentena he aprendido a apreciar los detalles de mi cuerpo. Me he desentendido de
las limitaciones que yo mismo le imponía en la “vieja normalidad” y he dejado que todo fluya. He
bajado de peso por comer sano y dejado crecer mi cabello (que suelo tener siempre a rape), cada
vez aprecio más mis imperfecciones.

Es una relación que va y viene. A veces la siento muy cercana por mis familiares, por la pérdida de
mi mascota debido a la vejez y por la cantidad de gente que aprecio mucho, actualmente en
peligro debido a su edad y a causa de esta pandemia.
Otros días está muy lejos, a pesar de mi edad, suelo divertirme con cosas muy simples y sencillas. Y
en ese sentido la música me ayuda a poner una barrera. Al hacer música me olvido del concepto
de edad y vejez porque siento que al componer estoy dejando un legado, una energía y
personalidad en forma de sonido que nunca envejecerá y que siempre estará presente.

Sí, ahora tengo más responsabilidades dentro de mi núcleo familiar. Pasé de ser el más pequeño a
ser una de las voces que toma decisiones y da consejos.

En ese sentido, el espacio se ha vuelto un concepto vital. Tener un lugar personal para tus
actividades y pensamientos es necesario para no agobiar a tus seres queridos con las frustraciones
y ansiedades que cada vez son más comunes durante esta época.
Me considero muy afortunado al estar cerca de mi pareja y de mis seres queridos, de entenderme
con ellos, de siempre tratar de trabajar en equipo, de comunicarnos de la manera más clara
posible y de que exista un respeto mutuo de nuestros espacios personales.

Siempre he tratado de apoyar a la red de talento local en la que estoy inserto, así como la que voy
conociendo poco a poco. Comprar música en Bandcamp, recomendar proyectos emergentes a
contactos de prensa que tengo, hacer conexiones entre conocidos, colaborar en proyectos que
impliquen entrelazar diversas disciplinas. Es algo que trato de implementar en mi día a día. Creo
firmemente que la única forma de crecer es cuando las personas a tu alrededor también crecen.

Lo mejor que me ha dejado la música es toda la gente que he conocido gracias a ella, personas
vitales para mi trabajo creativo. Las experiencias y memorias que me han transmitido son la
materia prima de todas mis creaciones.

Por la colaboración, en todos los sentidos. Creo que es la forma más simple y poderosa de hacer
que una comunidad creativa crezca. Mi apuesta está en los proyectos interdisciplinarios, en la
mezcla de géneros musicales dispares, en la experimentación del lenguaje, ya sea sonoro, musical,
gráfico, escrito o performático, y en los puentes que estas actividades pueden crear.
Portada de “Un Grito Encerrado”. Música de Edgar Mondragón e imagen de Erik López
''Refugio'' (Versión binaural)
Video por Erik López
Teaser de ''No Hay Recuerdo Que No Se Apague''
Video por Erik López
''Bliss''
Video por Mariana Dianela Torres
Belleza
Familia
Amor
Trabajo