22 años
Está en Culiacán, Sinaloa
Antropóloga y artista visual

Interrumpí un momento decisivo en mi vida, me había mudado a la CDMX para buscar
oportunidades, especializarme en estudios y oportunidades profesionales, pero tuvo que quedarse
en pausa. He comenzado a fortalecer otras de mis actividades aparte de la antropología, otros
proyectos musicales y visuales.

Tengo días en donde ni siquiera pienso en mi apariencia y otros donde es todo lo importante.
Desde que inició la cuarentena, he notado que es muy fácil observarse y empezar a atacarse a una
misma, pero trato de mantener una relación sana con mi cuerpo, ya que la mente estando
aburrida puede ser muy hiriente. Prefiero distraerme de inmediato cuando tengo una perspectiva
negativa de mi misma. Cuando ni siquiera pienso en mi cuerpo, resultan los días más productivos y
con más energía.

Antes de la cuarentena aceptaba la idea de envejecer, me emocionaba crecer. Desde que empezó
toda esta situación, el 2020 ha estado en pausa, desarrollé un desespero muy grande por
envejecer y sentir que no pasa nada en el presente. Veo la vejez como algo muy próximo a mí e
incluso me aterra. Siento que este año nadie debería de cumplir años, ojalá que todo se quedara
estático y nuestra relación cuerpo-tiempo volviera a un estado neutral, porque añorar volver a la
normalidad será imposible.

No realmente, sigo estando en casa, conviviendo con mis padres en el rol de hija, soy afortunada
de que estén sanos y de que nuestra cuarentena sea tranquila.

Sinceramente empiezo a pensar más en mí y en el propósito que tengo ahora. Sonará a cliché pero
considero importante mi bienestar personal, que mi relación conmigo no sea autodestructiva ni
repita patrones negativos. En estas épocas, a pesar de todo lo que pasa socialmente, una puede
sentir mucha soledad y desespero por lo desconocido, así como por uno mismo. Entonces trato de
tener los pies en la tierra y mantenerme positiva en cuanto a mis alrededores personales.


Mantengo una relación constante con mis amigxs, estamos preparando proyectos visuales y
también por sacar música juntxs. Lo que nos importa en este momento, es realizar las cosas sin
tener ningún prejuicio ante lo que hagamos. Lo importante es fortalecer el lazo autodidacta que
nos une a varixs de nostrxs.

El contacto con amigxs y personas que están realizando proyectos y buscando colaboraciones.
Intento seguir pensando mi trabajo fotográfico en la actualidad que hoy se vive. Desde que inició
la cuarentena, las fotografías que he tomado han sido muy escasas, estoy intentando adaptar y
evolucionar mi manera de producir proyectos.

Ahora más que nunca, es cuando las cuestiones virtuales y saber cómo manejar el marketing en las
redes sociales, es importante. En lo personal, me informo en cuanto a los códigos de seguridad y
leyes que hay detrás de cómo se mueve el dinero en internet, en las nuevas formas de pago
virtual, y en cómo usar PayPal y otras plataformas.

¿Qué interrumpiste y qué has comenzado a causa de esta cuarentena?




¿Cómo ha cambiado la percepción que tienes de tu cuerpo?






¿Cuál es tu relación con la vejez?






¿Ha cambiado el rol familiar que interpretas?


¿Cómo experimentas tu intimidad durante esta pandemia?






¿Qué iniciativas tienes por tu comunidad creativa?




¿Qué relaciones sociales son relevantes para tu trabajo creativo?




¿Por qué modelos de economía creativa apuestas?

Belleza

Familia

Amor

Trabajo

Fotografias y pinturas por Francia Aguilar