48 años
Está en Ciudad de México
Artista visual y docente
Piscis ascendente Piscis con luna en Tauro

Mayo

Más que interrumpir, he seguido trabajando desde casa en proyectos que colaboro pero que se han visto precarizados económicamente para continuar. Lamentablemente, he tenido poco tiempo y recursos para revisar, editar y seguir trabajando varios aspectos de mis propios procesos.

Trato de ser amable. En los primeros días estaba preocupada del sedentarismo por venir, en los kilos que
con algunos sacrificios había perdido y que no quería recuperar. Intenté empezar un hábito con los
famosos 21 días de ejercicio, pero el ánimo no da a diario para eso, no se trata de una situación normal.
Mi roomie es chef y normalmente no está en casa, ahora su trabajo está en paro, está cocinando todos
los días y lo estoy disfrutando. Decidí no presionarme y llenarme de culpas inútiles en el momento
menos oportuno. Estoy tratando de tener un cuerpo sano, la mente es lo más complicado, pero comer
rico hace felices al cuerpo y mente. Para compensarlo, salgo por bastante tiempo dos veces al día, para
pasear a Nina durante horas en las que la calle está casi desierta. Estoy aprovechando para caminar toda
la colonia y ponerme al día con los cambios y la gentrificación que la pandemia puso en pausa.

No tengo problema con la edad ni con los años por venir, pero me preocupa la salud, la incertidumbre
que como trabajadores independientes vivimos sin prestaciones sociales, la precarización laboral que ya
sufríamos y que parece será cada vez mayor. La pandemia evidenció un sistema de salud frágil,
inaccesible e insuficiente, un panorama que me aterra.

No en realidad.

En relación a una pareja, no la tenía antes ni ahora, por el momento no la echo en falta. La intimidad,
entendida como cercanía, se ha dado con mi espacio, vecinos, roomie y mascota.

En principio, es importante replantearnos el futuro de nuestras disciplinas ante los embates cada vez
más frecuentes por parte del Estado, que considera poco indispensable al arte frente a las prioridades
del sector salud y la actual contingencia. La problemática a la que recientemente hizo frente la
comunidad cinematográfica, para echar atrás una propuesta de decreto que buscaba desaparecer el
Fondo de Inversión y Estímulos al Cine, es un ejemplo de las batallas por venir. Pienso que la iniciativa
más urgente es fomentar el diálogo, mantenernos informados y crear redes y estrategias para evitar la
precarización y desaparición de museos, foros, programas y proyectos que repercutirán tanto en nuestra
labor creativa como en nuestras ya de por sí inciertas fuentes de trabajo.

La relación con pares, con curadores, ONG’s, migrantes y gente relacionada con los temas que trabajo.

A raíz de la cuarentena se ha generado una red de vecinos en mi colonia, vía grupos de WhatsApp y
Facebook, de prestación, venta y renta de servicios. Las tiendas, farmacias, fondas, negocios particulares
y del mercado (que recientemente sufrío una incendio) publican su oferta y hacen entregas a domicilio.
Los vecinos ofrecen sus habilidades y oficios, se comunican noticias, responden dudas y da solución
colectiva a problemas específicos de algunos vecinos. La necesidad de las personas por seguir trabajando
y generando recursos no pueden esperar a que el gobierno decrete la reactivación económica. Pienso
que este modelo de generar redes de apoyo y activación económica, podría en otra escala e
involucrando a otros actores, replicarse en nuestras comunidades artísticas.

¿Qué interrumpiste y qué has comenzado a causa de esta cuarentena?



¿Cómo ha cambiado la percepción que tienes de tu cuerpo?









¿Cuál es tu relación con la vejez?




¿Ha cambiado el rol familiar que interpretas?

¿Cómo experimentas tu intimidad durante esta pandemia?


¿Qué iniciativas tienes por tu comunidad creativa?








¿Qué relaciones sociales son relevantes para tu trabajo creativo?

¿Por qué modelos de economía creativa apuestas?

Las fotos mostradas aquí pertenecen a su serie Parajes.

Belleza

Familia

Amor

Trabajo